¡Oye! ayudame a sujetar las esclusas que encierran
todas las lagrimas que derrama la humanidad,
ayudame a convertirlas en una sin razón,
en una leyenda y no dejarlo como una historia,
como un cuento escrito en el viento,
no dejarlo como un vivir hacia la muerte sin pensarlo,
sin ser objeto de un corazón abocado a un nacimiento,
que con una vida apagada te llevó a una muerte vacia, con sufrimiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario