SABORES A RUINA
Tan
lejana es la distancia entre tu villa y mi tiempo,
entre
el fuerte de Loreto y la ecuación de alma mezquina,
corrigiendo
con firmeza mis entrañas llenas de inquina
ante
este despropósito que me genera la estrella de los vientos.
No
es el volcán que sombrea tu ciudad, ni su humo eterno,
ni
Popocatépetl que puso a su amor en la cima de forma supina,
es
mi suerte que me ahoga con rumores de ruina
ante
esta espera delirante que me lleva desde ti, al averno.
Una
lucha conmigo mismo esta acabando con mi potencia,
lleno
de incertidumbres es este texto terminal e insolente,
no
está en venta el paisaje que inventó la carencia.
Mezclándome
en tus venas como vil repelente,
como
un regalo forzoso y a la vez de letal esencia….
reclamo
tu indulgencia para este desheredado inconsciente.
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