UNA SALA MAS.

Hay musica de lobos con sabor a sordina,

querubines destapando el tarro de las esencias,

hay sentimientos de nada con olor a pudridero,

soledades con venganza y sudor de estercolero,

donde el frio lo tapan las sabanas porque el amor es perecedero,

donde los hobbys son macabros por un puñado de celos,

porque tan solo es un entretenimiento adornado con llamas de fuego,

donde la belleza entre bambalinas se instaló en forma de juego.