domingo, 21 de agosto de 2016


                                                                                 XIX
Cuando el tiempo corre a favor de lo metódico, tradicional, lineal, cuando la mente es confusa, solo decides continuar sin apariencias, sin ruido, dejando pasar lo más esencial del hombre. Largo camino por recorrer, requiebros del mas allá, encrucijada de oscuras andanzas, senda de libertad

                                                                                   XX
                          Reconversiones salvajes, noes a la O.T.A.N, huelgas, ignorancia, democracia, recelos del pasado, terrorismo, movida madrileña, alegrías desmesuradas y fantasías animadas, religiones en cabestrillo, época de andanzas, transición con alabanzas. La vida continua, y crecer es símbolo de esperanza, cumplir años sinónimo de templanza, aunque no siempre es así, sobretodo cuando entras en la dinámica del no vale todo, de que tu voto es algo mas que colocar una poltrona mas grande para que quepan mas libertadores arrogantes en esta España delirante en el que todo vale, sacrificando ideales por un montón de papeletas, que mal contadas colocan siempre a los mismos en lo mas alto de los altares haciendo grande el discurso de “tanto das, tanto vales”. Dejando atrás la utopía, casi un adaptado, sin ser sombra del pasado que tanto dolor producía, más que declararme inconsciente me declaro en rebeldía.

Pocos son los años que me restan,
y es sin vuelta el camino por el que voy,
pero no dejaré que prevalezca
la angustia perversa del futuro,
aunque imperfecto…prefiero el hoy por hoy.

Y no hago más que dar vueltas,
modelo el tiempo perdido,
porque un hombre como yo, no quiere
ser recordado por un futuro incierto.
apagado y tormentoso momento no vivido.

Proyectar el mañana sin sacudirse las dudas,
trastornado por la piel llena de arrugas,
hastiado de incertidumbres y de lagunas,
aspiras al olvido de dejar pasar el tiempo,
siendo el día a día mi gran aventura.

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