Si se pisa una flor
queda la huella sucia
de un calcetín mojado en cada petalo.
Si se condena al hombre
se llenarán de lepra las ciudades.
Si se acaricia el arpa,
mientras el hambre suena
la poesia se llenará de gusanos.
Arrojemos estrellas
a los charcos del mundo.
La tierra es una clinica
y la muerte un relampago de níquel.
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