jueves, 16 de abril de 2015

Como dos gotas de agua
Estas filibusteras de alto copete
que se ponen la peineta dentro y fuera del carnaval,
venden humo en época de elecciones,
la una de nombre Esperanza, la otra se apellida Cospedal.

Hasta llegar a donde han llegado
a todo un país han manipulado,
la mas anciana, una “Gurtel” nos ha regalado,
la menos vieja un “despido en diferido” nos ha colocado.

Ellas son la portada de un partido amañado,
tan retrogradas como unos políticos anticuados,
tan poderosas como un laxante en un cuarto de baño,
tan falsas como el bienestar de un parado.

Pero lo importante no es lo que son,
es lo que fueron antes de tal ascensión,
la una...pose estatutaria en la corte de Nerón,
la otra...traductora de latín con el maestro Platón.

Después de tantos siglos errando entre la peste
lo único que han aprendido es a tener manga ancha,
a pintar ladrillos con gaviotas de color celeste,
a ser las reinas del baile y tener la boca chancla.

No hay comentarios:

Publicar un comentario