Destierro

Hay un murmullo que parte en dos mis besos,

¿que oscuro surco me deja a solas

cuando mas necesito salir de las tinieblas?.

En estos muros las palabras sangraron,

dejamos que el amor no perdurase

y tu y yo nos hicimos daño con ellas.

En esos muros las palabras ardieron,

no vimos crecer los miedos que afloraban y

tu y yo nos atrapamos en la miseria.

Como astros encendidos, como dioses y titanes

dejamos la vida decapitada mientras

dormía el amor sobre almohadas de piedra en la nada.

Donde quiera que more de ahora en adelante,

sera vivir en un destierro, sin alma, sin ella,

no supe, no he sabido salvar este cuento de hadas.

Anclado en el tiempo

Llegué como llega la ilusión,

ansioso, rebosante de hacer camino,

planificando la ruta

de una obsoleta revolución.

Y conocí la alegría de un pueblo,

con sus hambres, sus sonrisas,

su maltrecha forma de vida

y su música a ritmo de “son”.

Un cuenta cuentos me habló de la desdicha de no ser rojo,

otro entre trago y trago me hablaba del “ Che”,

alguien me dijo que un catamarán era una especie de nicho,

el ron de otro...de la miseria de los despojos.

En un bar de Santa Clara

un cubano de pro me cuenta con desasosiego

que lo de la tormenta solo es un chanchullo

para ocultar la muerte de Cienfuegos.

Los hombres creamos a héroes y villanos,

es la causa de que a todos los midamos con la misma vara,

pero si hay alguno con una estrella reluciente,

ese es sin miedo a equivocarme...Ernesto “Che” Guevara.

Leyendas en las cunetas enseñan el recorrido

de 50 años de nada, de miedos y olvido,

mientras tanto la selva se apodera del destino

y yo agoto mi ideología con un buen vaso de vino.

¿Solo humos y espejos?

Muéstrame una señal en ti,

me haces sentir lejos,

quiero creer en ti,

arrebatadora de vidas,

hacedora de sueños,

me haces perder mi fuego,

estoy empezando a ceder,

este dolor estaba empezando a desaparecer ,

pero debe de ser

que en lo mas hondo de mi corazón,

en lo mas profundo de mi mente...

nunca te dejé de querer.