APESTOSA CRISIS

Jugones de bolsa y especulantes con olor a banquero,

avarientos del ladrillo, amasadores del dinero,

crisis abrupta, eterna, de estercolero,

bolsillos con sabor a nada, despertar con desespero.

Fríos tiempos que anuncian el pudridero,

jaque mate a las almas que transitan por el tablero,

crisis abierta, sublime cuesta de enero,

políticos parlanchines con los ojos en el trasero.

Las gentes en las calles soportando el aguacero,

el dinero en paraísos que encharcan el sendero

haciendo el camino pesado como losa de acero,

y en la beneficencia estaremos, todos, menos el clero.